martes, 25 de mayo de 2010

Sobre todo alisios.

El planning...

El fin de semana se avecinaba de otra forma. En principio las paginas dedicadasa la meorología pronosticaban una bonanza terrible: mar de fondo nula y un viento moderado ideal para visitar pesqueros que son intratables a lo largo del año. Los planes ya estaban hechos, los anzuelos afilados y los señuelos listos.
La idea que teníamos era la de aprovechar el Domingo haciendo un poco de jigging y spinning en la semirrígida del amigo Aarón. Tenemos en mente unas piedras de abades que hace tiempo no tocamos y de camino nos podemos también permitir hacer un poco de spinning para entretenernos más si cabe. Ese era el plan con el de La Asomada.
Por otro lado, con Dani barajábamos la posibilidad de coger la mochila, una caseta de campaña, sacos, aceite, un camping gas (junto con otros elementos indispensables como cuchillo, malla de acero, pan, latas de conserva, jamonilla... lo básico en una acampada) y los equipos de pesca para pasar la noche del Domigo y el Lúnes caminando y pescando. Estamos acostumbrados a las acampadas estilo pesca-supervivencia, y gozamos cada vez que tenemos la oportunidad de estar en contacto directo con el medio, sin bombillas, televisión ni ruidos de ningún tipo. Finalmente no pudimos cumplir el plan, una lástima, pero también una decisión correcta pues la meteorología nos iba a jugar una mala pasada y no era plan de que ésta nos pillase desprevenidos. Había que aprovechar antes de que entraran los alisios.
Jigging, Spinning?? Jigcasting!!                  
El Domingo ya estábamos Aarón y servidor en el agua a las 7 de la mañana.
Después de llegar al primer puesto de jigging que se sitúa sobre los 80 metros de fondo, y no sentir nada durante una hora, vamos tocando piedras que nos llaman la atención de camino a ese puesto de abades que pretendemos pescar. El viento es bueno, la marea viene llenando y el agua está bastante clara, por lo que tenemos ilusiones y ganas de pasar un buen rato.
Los primeros momentos en ese pesquero fueron tan tensos como aburridos.
Durante unas horas le pusimos empeño, probando en todas las marcas de la zona e incluso haciendo algo de spinning costero en busca de cualquier pez que nos diera algo de acción. Un desastre.
Compaginar Spinning y Jigging, un acierto.                   
Ya me había dicho algún local de varadero esa mañana que no era un buendía de pesca, que la actividad no era buena. Pero como para eso soy algo escéptico y he hecho buenas jornadas en esos días, no hice mucho caso. Chismosos... al final tienen razón y no vamos a tocar escama...
Ya eran las 12 del mediodía y no se sabía nada de los bíchos. Decidimos poner rumbo a casa para ir tocando a la vuelta, y se me ocurre proponerle al amigo visitar una zona de difícil acceso desde tierra en la que sé que hay vida. Vamos a darle la última esperanza al spinning embarcado.
Lo que son las cosas, nada más llegar comienzan a producirse ataques de las bicudas; tres suben a vernos y muchas vienen tras los señuelos, pero extremadamente poco activas. A mi lado comienza a levantarse carnada y presiento actividad en el fondo. Es Aarón el primero que pone un jig-cucharilla que se revela como killer y no perdona a las bicus, mientras yo me quedo rezagado con los minnows y decido probar con paseantes.
Le sugiero al compañero, que aún está en fase de aprendizaje y no ha terminado de engancharse a esto de los señuelos(hoy lo hará y me dará una paliza), que deje caer el trozo de hierro hasta el fondo, y lo trabaje como un jig.
Una vuelta, dos vueltas...y pegado! Ahora la vara se doble bastante, suena la chicharra con otras notas y se presiente animal más peleón. Una lucha divertida,  y Aarón sube desde los 30 metros de fondo una sierra que no se quería perder la fiesta que había en el agua.
Ya no puedo más, saco otro jig minúsculo y copio al compañero, que sigue enredado con las bicudas. También dejo caer hasta el fondo, y voy "barriendo" en busca de la frenada. Y esta llega, pero se suelta y me deja la baratija de triple que trae el señuelo abierta como una jarea. Mea culpa...
Mientras, de nuevo el compañero engancha en el fondo y sube una negrita pequeña pero peleona, de esas que te hacen pensar que traes un bicho más contundente:
Tras este, muchos compañeros suyos subieron hasta el mismo casco detrás de los señuelos como ellos suelen hacer, sin llegar a decidirse finalmente a atacar, y cuando lo hacían, siempre en el fondo, por desgracia para nosotros se soltaban. Otro día volveré más preparado y con la mente puesta en ellos.
Curioso, pero cierto, de nuevo la constancia y las ganas de pescar fueron nuestro aliado, dando sus frutos en apenas una hora y media, después de haber pasado una mañana entera machacándonos los brazos inútilmente con el jigging. En ese rato logramos embarcar y liberar 9 bicudas,(6 para Aarón y 3 para mí) una sierra y ese esporádico medregal que ponía la guinda a un día tan raro como entretenido.
Raro por la actividad y porque se empezaba a notar una brisa no prevista del nor-este...
Alisios y pesca           
- Pesca y alisios?, deberías de haberlo titulado "Alisios y pesca", porque esto no es normal...
- La verdad que sí, cuando no estamos pescando, estamos aguantando temporal... 
- Habrá que ponerle voluntad...
- Jejej, la verdad que sí, habrá que ponerle voluntad... no nos queda otra.
Es parte de una conversación de Dani y servidor estos días, mientras nos quejábamos amargamente de como había cambiado el tiempo para mal nuestro, con un viento que en ocasiones se hizo inaguantable.
Esto es lo que nos encontramos al llegar. La cosa fue cada vez a más...              
Desechada la opción camping-pesca, decidimos levantarnos temprano el Lunes y dirigirnos a una zona cercana. Una suave brisa del norte avecina temporal y parece que las predicciones eran erróneas y el fuerte viento hará pronto acto de presencia en nuestras costas.
Las primeras horas de la mañana trascurren tranquilas y aburridas, sólo un pejerrey ha saltado bajo nuestros pies, errando el ataque y marchándose por dónde ha venido para no dejarse ver más. Nos movemos por todo el veril, vamos lanzando aquí y allá hasta que cerca del medio día por fin se rompe la monotonía.
Algo ataca el señuelo pero falla, le imprimo velocidad y al llegar bajo mis pies un rayo plateado apresa el señuelo y sale disparado en paralelo al veril, rozando y sacando hilo con fuerza.
Después de breves momentos de lucha y nervios (me encuentro en un veril de los catalogados difíciles y peligrosos), pongo en seco un hermoso pejerrey:
Como es normal, esta captura nos sube un poco la moral, que ya estaba por los suelos después de una mañana tímida en acción, y obtenemos recompensa enganchando otros dos buenos bichos por parte de Dani, pero que después de breves momentos de lucha acaban cortando ambos el bajo de 40 lb. Se huele el mosqueo en la zona, comienzan a sonar las tripas y decidimos ir a casa para almorzar y descansar un poco. Aún nos queda la marea vacía de la tarde.
Dos horas después, de nuevo en el veril y ya acompañados por la bajamar, volvemos a movernos por la zona y es esta vez Dani el que me avisa y reclama mi ayuda.
Cuando llego, está luchando con una bonita sierra, que vende cara su vida luchando en la pared del veril y aprovecha la fuerte subida y bajada de las olas para ponérselo difícil al compañero.
Parece que los habituales están patrullando el veril, en un día en el que el viento cada vez va a más y parece que también quiere ser protagonista.
Seguimos moviéndonos por la zona, cuando hacen acto de presencia un bando de pejereys que persiguen los señuelos una y otra vez, pero no se determinan a atacar.
Durante unos 30 minutos nos mantenemos en el sitio, insistiendo hasta que de nuevo a mis pies se frena el señuelo, aguanto la embestida y sin mucho esfuerzo pongo en seco uno de esos pejereys que se mostraban recelosos y que finalmente acabó sucumbiendo ante el instinto:
De los otros compañeros del carángido, ni idea, ya no aparecieron más y sólo algún tímido ataque nos mantuvo otro rato en aquel puesto.
Después de un baño y reponer fuerzas con algo de alimento, decidimos movernos de nuevo hacia una zona que nunca hemos visitado y parece prometer.
Al primer lance, clavo en seco y nada más comenzar a sonar la chicharra, se suelta. La cosa promete, y a los pocos minutos es Dani el que tiene otro ataque a sus pies de un gran pejerrey que no clava y nos deja de lo más exaltados al pensar que hay buenos bichos rondando esta baja.
Unos cuantos cañonazos más y de nuevo canto picada a unos cuantos metros de las piedras. Lo dejo que corra, que se canse y se deje la vida corriendo mar adentro, eso me facilitará luego el trabajarlo cerca de las piedras. La caña se dobla bastante y el bicho pelea en el fondo, lo que nos hace pensar en un buen animalito, y este comienza ahora a correr de nuevo en paralelo a la pared del veril, comprometiendo en ocasiones la integridad del Powerpro 40lb. Tras alguna peripecia, hago que suba a superficie para que se deje ver la cara y resulta ser otra sierra peleona y entradita en carnes, que una vez puesta en seco nos sorprende por la batalla que ha dado, habiendo logrado confundirnos.
Eso fue todo lo que nos deparó un día muy entretenido, caluroso y en el que el viento finalmente hizo que nos decidiéramos por volver a casa cansados y quemados por el sol con las pílas cargadas para unos cuantos días..
Han sido dos jornadas de pesca, una dedicada al jigging en el que finalmente el jig-casting nos salvó del bolo e hizo que nos divirtiésemos como enanos, y otra acompañado por el hermanito Dani de la realmente disfrutamos como nos gusta, sin mucha gente a nuestro alrededor y con la cabeza puesta sólo en eso, en la pesca.
Ahora, toca Alisios...

9 comentarios:

Brujulas dijo...

Como le gusta la captura y suelta...jejeje.

Saludos.

Femés Elvira, CFS dijo...

Sinceramente Gorka, y a pesar de que con alguno pueda no estar de acuerdo, en muchas ocasiones me siento más satisfecho soltando pescado que llevándomelo todo a casa.

Por un lado no me siento bien conmigo mismo si contribuyo a esquilmar el mar, por otro a veces se da tan bien la pesca durante unos días que es necesario soltar pescado, pues tampoco uno es una pescadería.

Siempre intento abastecer a la familia y tener el pescado que necesito en el congelador (humildemente, se me da algo la cocina y soy medio gato para el pescado y el marisco...jejej).
Recuerdo haberme visto en alguna ocasión hace tiempo con pescado de sobra, y al final tener que regalar innecesariamente, eso ya no me gusta que se repita.
Lo dicho, que mientras tenga lo necesario para comer, el resto, sean grandes o pequeños, van al agua.

Saludos Gorka.

Marco dijo...

Aventura a tope de adrenalina por el hecho de depender del mar, aunque el tiempo no ayudo.... Magnifico report.

Saludos compas

Efrén dijo...

Que estupendo reportaje y vaya días de pesca. Que envidiaaaaa....
Saludos.

Femés Elvira, CFS dijo...

Gracias chicos.
La verdad que el tiempo no ayudó mucho, pero pasamos unos días muy entretenidos. A ver si sigue la racha.
Saludos.

raul lomac dijo...

xaxo xaxo yo yaaaaaaa es que ni comentoo... ya se yo porque luego cuando voy yo a hacer jigging o spinning no cojo naaa... arooo vais tu y dani antes y me dejais el pescao recelosoo jajajaja

muy buena señorees y como siempre los relatos de revistaa..

UN SALUDOOOS

David Martín Alcaraz dijo...

Vaya criaturicas que pilláis. Eso debería ser ilegal, o al menos contarlo, que ando una temporadita en dique seco :):):)
Enhorabuena por esos trofeos y ya me cuentas a ver qué tienes pensado para el verano.
Un abrazo.

Femés Elvira, CFS dijo...

Jjejejej
Raúl, no te creas, a uno a veces también le cuesta disgustos sacar un escamudo, claro que múchas veces esos disgustos se disfrutan.
Tenenos que coger un día la ranchera Jimenez e irnos de ruta pesquera, te va gustar.

Lo siento David, pero a mi también me crea ofuscación el ver las jornadas de pésca que se hacen por ahí arriba: los parajes, la tranquilidad, el ruido del río, de los pajaros...el escenario en sí, unido a esa técnica tan ligera y sutíl como es la de mósca y casting, me parece sencillamente fantástico.
Gracias compañero, ya hablamos y nos ponemos al día. Otro abrazo.

Pd: Un compañero me comenta que tiene problemas para visualizar el blogg y comentar en él. Alguien está teniendo problemas??
Por favor, si es así y no es mucha molestia, diganme si hay alguien más está teniendo algún problema para ver que puede ser y darle solución. Gracias a todos.

raul lomac dijo...

el patron de la ranchera dice que sin problema!!

cuando quieras nos pegamos una rutita en busca de los escamudos...


PD: en mi ordenador no sale ningun fallo :)